Ya casi estamos terminando el trimestre y con él nuestro proyecto, pero aún estamos haciendo alguna actividad que resulta interesante para conocer un poco más la forma de vida de nuestros antepasados.
Nuestra cueva estaba un poco triste, sólo la teníamos decorada con la manos en positivo que habíamos estampado.
Les prometí que cuando fuera a mi pueblo les iba a traer carbón para poder pintar igual que hacían los prehistóricos y, aunque me he demorado un poco, por fin llegó el carbón.
Les ha sorprendido comprobar lo que pinta y lo que mancha y han disfrutado bastante con este nuevo material.
Intentamos decorar nuestra cueva imitando las pinturas rupestres y cada uno lo hizo como pudo.
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Tenemos bisontes, mamuts, caballos, escenas de caza,... ¡Auténticas obras de arte!
También hemos hecho vasijas de cerámica.
Este fue un gran descubrimiento de la época y no podíamos dejar de trabajar con él.
Les gustó mucho pero hay que reconocer que les resultó complicado.
Necesitaron un poco de ayuda para terminar sus cuencos.
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